Últimamente me da por escribir reseñas sobre películas que veo a voleo. Cuando veo alguna francesa suelo interesarme y decidirme por verla si me interesa lo suficiente su sinopsis. «El sr Henri comparte piso»es una película entre el drama y la comedia, muy francesa, pero la típica de las que me suelo tragar. Una joven de Orléans (Francia) quiere irse a estudiar a París y dejar de trabajar en el puesto de su padre en el mercado. Normalmente no es buena estudiante, suspende con facilidad, su padre no espera gran cosa de ella y la autoestima de la chica se resiente. Contacta con un hombre que quiere alquilar una habitación en el piso de su padre ya mayor, (el sr Henri). Viudo, gruñón y reacio a compartir piso con un desconocido. La joven Constance sabe torear sus impertinencias haciendo oídos sordos, todo con tal de poder quedarse en la habitación que le dejan a un precio especial siendo París.
La película prosigue con encuentros y desencuentros entre la joven y el sr Henri, el intento de flirteo de ella con el hijo de éste a cambio de su permanencia en el piso, para luego pasar a la aceptación de la vida de unos y otros. De enfrentarse Constance a sus miedos, a sus aspiraciones, como es tocar el piano, y no hacer lo que su padre tiene pensado para ella. Igual suerte tiene el hijo del sr Henri, Paul, sin grandes ambiciones e influenciado por los consejos de su padre. Todos aprenderán a buscar su propio camino, incluso el sr Henri. Para mí lo mejor de la película son las interpretaciones de Noémie Schmidt , como Constance y de Claude Brasseur, el abuelo cascarrabias, el sr Henri. Otros personajes y tramas están demás, pero entre ellos la química es más que notable.
Esto de compartir piso, de la relación entre inquilinos y caseros tiene su miga. Se mezclan a menudo mucho las vidas de unos y otros, como en la película. He sido casero, compañero de piso e inquilino. He estado en todas las trincheras. La verdad es que es agotador.
El casero más extraño que tuve fue en Suiza. Era suizo al 100%. La convivencia parecía modélica, casi idílica, hasta que empezaron las continuas visitas e intromisiones en mi vida como inquilino. Mis caseros vivían en el piso de arriba. Nunca mais. Cada tres días me venía el señor con una historia. El wifi cancerígeno, la puerta del jardín que misteriosamente se abría pudiendo escapar su perra la cual me responsabilizaba a mí sin ninguna razón… Aguanté muchas de las pruebas que me hacía, al igual que a la protagonista de esta película. ¿Os han pasado historias parecidas compartiendo piso o con la relación invasiva de tus caseros?
Por cierto, la chica protagonista, Noémie Schmidt es suiza también, concretamente de Sion, un pueblo situado en el Wallis. En la quinta puñeta de todo. Si queréis perderos un día de todo y de todos, id a Sion. Por otra parte Claude Brasseur (el sr Henri) es hijo y padre de actores, un veterano y laureado actor francés que también fue piloto en el París Dakar, una carrera que llegó a ganar en los años sesenta. Y es también ahijado de Ernest Hemingway. Vaya biografía. Y uno aquí comentando pelis en su blog personal. :-S