Ayer, paseando con la bici, por el pueblo de al lado, avistamos una veleta que me había pasado desapercibida hasta ahora, y eso que paso cada día por allí. Se trata de unos gansos, presumiblemente echando a volar. Que digo yo que esto sera algo premonitorio, porque uno de ganso tiene un rato largo, y el viaje comenzará en pocos días.
Estoy contento, he podido cazar una nueva especie animal. Ya tengo perros, gatos, caballos un puñado, cotorras, búhos, palomas, gallos a patadas, y ahora gansos. Esto empieza ya a convertirse en el Arca de Noé.